Climatización y calefacción

Los sistemas de calefacción, climatización, agua caliente y calderas constituyen un importante gasto energético. Por eso, cuando se diseña un sistema de climatización se debe valorar la zona climática, las dimensiones y el uso del edificio. También es importante tener en cuenta el número de personas que van a vivir en el inmueble y las características de la estancia.

La climatización más eficiente en tu hogar

Utilizar sistemas de aire acondicionado de alta eficiencia te ayudará a ahorrar energía, reducir las emisiones de CO2 y evitar obras de gran envergadura y altamente costosas en tu vivienda.

Hoy en día hay aires acondicionados con sensores inteligentes que reducen o aumentan el caudal de aire dependiendo de diferentes factores que ocurre en un determinado momento en la estancia donde están instalados. Lo mejor de estos equipos es que el consumo puede reducirse casi un 40%.

Existen diferentes tipos de aire acondicionado que van desde el de ventana, hasta el portátil, pasando por el split y el central. Además, son de diferentes formas y se pueden instalar tanto en la pared, como en el techo o incluso en el suelo.

Más calor, a menor coste

Una buena forma de ahorrar energía es cambiar la caldera de calefacción y agua caliente sanitaria por una nueva de alta eficiencia energética. Este tipo de calderas producen ahorros de energía superiores al 25%, lo que hace que se recupere el coste inicial rápidamente.

En cuanto a los sistemas de calor, se puede decir que los que se surten de gas natural o de biocombustible resultan los más económicos. Por detrás de ellos, el sistema por bomba de calor aerotécnica, con un equipo de clasificación energética A, sería el más barato.

A una gran distancia en lo que a ahorro se refiere, se encuentran los radiadores eléctricos, así como aquellos que funcionan gracias al gasóleo.